Un dirigente peronista reclamó de autocrítica: “Dimos un espectáculo decadente”

“¿Cómo llegamos hasta acá?”, con esa pregunta el dirigente peronista y empresario Pyme de La Plata, Federico Martelli, inicia un fuerte reclamo de autocrítica para los dirigentes de su partido, enumerando errores y malos resultados de las últimas gestiones de gobierno. Martelli critica al actual gobierno de La Libertad Avanza liderado por el presidente Javier Milei, pero antes asegura que su ascenso al poder es responsabilidad del Partido Justicialista en sus distintas variantes. “Milei es hijo nuestro, ¿o nos vamos a seguir haciendo los boludos?”, reclamó Martelli.

“Se tenía que decir y se dijo”, aparece entre los primeros comentarios que acompañan el video subido a redes sociales este lunes 22 de abril, en el que el dirigente platense, secretario general del Movimiento Unidad Popular (MUP), encadena una serie de reproches hacia el desempeño del peronismo en sus últimas experiencias de gobierno.

“Repetimos como loros el Estado te salva, pero no pudimos brindarle al pueblo salud, educación ni seguridad”, “no pudimos combatir la inflación ni ordenar la macroeconomía”, “os transformamos en una máquina de impedir para los que querían invertir”, son algunas de las frases que enumera el dirigente.

Martelli incorpora alguno de los debates que el gobierno actual plantea y que tanto la presidencia de Alberto Fernández como la anterior de Cristina Kirchner habían aplazado, como la reforma laboral, a la que considera necesaria. “Somos peronistas y nos tenemos que hacer cargo de que Milei es la consecuencia de no haber resuelto los principales problemas cuando fuimos gobierno”. apunta Martelli.

“Culpar de todo a Milei es fácil, pero la pregunta es ¿cómo llegamos hasta acá?”, introduce el platense y luego se responde: “El Estado no cumplió, las calles se transformaron en propiedad de los delincuentes, la economía fue un desastre, llevábamos 12 años sin crecimiento económico y sin mejora del salario, mantuvimos los índices de pobreza altísimos, no pudimos combatir la inflación ni ordenar la macroeconomía, y nos transformamos en una máquina de impedir para todos aquellos que querían invertir y generar valor. Dimos un espectáculo decadente”.

“Durante los últimos cuatro años mostramos peleas internas, acusaciones cruzadas, berrinches y falta de transparencia”, insistió, haciendo ahí sí una referencia concreta al paso por la gestión de la fórmula Alberto Fernández – Cristina Kirchner entre 2019 y 2023.

Martelli se presenta en sus redes sociales como director de la Cámara de Empresas Pymes Regionales Elaboradoras de Biocombustibles (CEPREB). En 2019 participó de las internas del peronismo en La Plata y manifestó su intención de competir por la intendencia de esa ciudad en 2023, aunque apoyó a otro dirigente de su espacio. Tras esas experiencias, el empresario volvió a levantar el perfil, en este caso para exigir un proceso interno que le permita al peronismo reinventarse ante el liderazgo del presidente.

“Sé que genera desconfianza cuando lo decimos, pero son los datos de la realidad: 60% de pobreza, 30% de caída de venta en las Pymes, 70% de inflación en los últimos 3 meses, 20% de caída del salario real y destrucción de las jubilaciones. Milei dice que va a bajar la inflación, ¿pero a qué costo?”, introduce Martelli para enfocarse en la gestión actual.

“Milei va a matar la economía real, mientras el sector financiero se va de fiesta”, agrega Martelli. Ante ese diagnóstico, el dirigente insistió en que, dentro del peronismo “nos tenemos que hacer cargo y mirar para adelante”, y propuso construir “un modelo de crecimiento económico con inclusión social”.

La crítica de Martelli aparece mientras en los últimos días volvieron a quedar expuestas las diferencias internas dentro del PJ, en este caso en la provincia de Buenos Aires, el bastión que aún conserva ese espacio político. Llega además luego de cuatro años donde la experiencia del Frente de Todos estuvo atravesada por las fracturas entre sus propios dirigentes, trabando la gestión, algo que derivó en un rechazo en las urnas producto de los malos resultados.