Modificar un solo grupo de alimentos de la dieta puede aumentar la esperanza de vida
Convencer a los amantes de la carne de reducir su consumo puede ser complicado, pero un estudio reciente ha revelado beneficios significativos de incorporar más plantas en la dieta que podrían cambiar su percepción. Forbes Health ha publicado un informe en el que se resaltan las ventajas de una dieta basada en plantas, donde afirman: “Las investigaciones vinculan continuamente el consumo de más plantas en general con una mayor salud y una vida más larga”.
Las investigaciones demuestran que consumir menos carne y aumentar el consumo de frutas, verduras, nueces y semillas está asociado a una mejor salud, y también a una vida más larga. No obstante, la adopción de una dieta rica en estos alimentos puede parecer abrumadora y costosa para muchos.
El reto del consumo en Estados Unidos
La realidad es que los estadounidenses no están consumiendo suficientes frutas y verduras. Según los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC), en 2019 solo el 12.3% de los adultos cumplían con la ingesta recomendada de frutas, y el 10% con la de verduras. Asimismo, los niños tampoco alcanzan las cantidades óptimas de estos alimentos esenciales. El informe del CDC indica que aproximadamente uno de cada tres niños no comió fruta diariamente durante una semana y casi la mitad no ingirió verduras diariamente.
Beneficios de una dieta rica en plantas
Una de las claves para una vida saludable es consumir una variedad de alimentos vegetales. Taylor Wallace, director ejecutivo de Think Healthy Group y profesor en la Universidad de Tufts, señala que estos alimentos son fundamentales para la salud, ya que contienen vitaminas, minerales, antioxidantes y fibra esenciales.
Entre los beneficios más importantes, la doctora Kristi Funk, del Pink Lotus Breast Center, apunta que una dieta basada en plantas es eficaz contra enfermedades cardíacas, accidentes cerebrovasculares, diabetes, obesidad, Alzheimer y ciertos tipos de cáncer. Funk subraya que las plantas tienen un contenido promedio de antioxidantes 64 veces mayor que los alimentos de origen animal.
Impacto en la salud del corazón
Está comprobado científicamente que el consumo de frutas y verduras disminuye los marcadores de daño cardíaco. Un estudio de 2020 en Annals of Internal Medicine observó reducción de estos marcadores tras ocho semanas de una dieta rica en plantas. Asimismo, un metanálisis de 2017 reveló que las dietas vegetarianas están asociadas con una disminución del colesterol total.
Prevención del cáncer y salud cerebral
El Instituto Nacional del Cáncer (NCI) confirma que quienes consumen una dieta rica en plantas tienen menor riesgo de contraer cáncer en diversas áreas del cuerpo, incluyendo boca, faringe, laringe, esófago, estómago y pulmones. En cuanto a la salud del cerebro, un estudio de 2022 indicó que esta dieta está relacionada con una mejor cognición en adultos mayores.
Diabetes tipo 2 y obesidad
Una dieta basada en plantas es también eficaz para prevenir y tratar la diabetes tipo 2 y la obesidad. La investigación publicada en Advances in Nutrition en 2021 y en Nutrients en 2018 indica que una mayor ingesta de vegetales conduce a un menor riesgo de problemas de peso y diabetes.
Consejos para incorporar más plantas
- Porciones adecuadas: Dr. Wallace afirma que, según las guías del USDA, se sugiere que más de las tres cuartas partes del plato consistan en alimentos de origen vegetal como frutas, verduras y cereales. Recomienda optar por proteínas animales magras y bajas en grasa como pechuga de pollo y cerdo sin piel.
- Estado del microbioma intestinal: El Dr. Funk sugiere comenzar con pequeñas cantidades de alimentos que puedan producir gases, como frijoles y tofu, e incrementar la porción gradualmente para permitir la adaptación del intestino a una dieta basada en plantas.
- Lunes sin carne: Davis propone practicar los “lunes sin carne” durante todo el día para experimentar cómo responde el cuerpo a una alimentación completamente vegetal y planificar comidas más efectivas.
- Productos congelados: Dr. Wallace señala que los productos congelados, cosechados en su punto de madurez, son duraderos, económicos y nutritivos. Davis agrega que son una manera práctica de introducir alimentos vegetales ricos en nutrientes.
- Opciones enlatadas: Según la Academia de Nutrición y Dietética, los alimentos enlatados preservan muchos nutrientes y son tan saludables como los frescos o congelados. Jackie Newgent sugiere usar calabaza enlatada como ingrediente en recetas tanto dulces como saladas.
- Consumo de soja: El Dr. Funk asegura que los estudios muestran una reducción importante del riesgo de cáncer de mama entre los consumidores de soja. Productos como tofu, edamame y tempeh son excelentes fuentes de proteína vegetal.
- Productos de temporada: Davis explica que las frutas y verduras de temporada tienden a ser más frescas, nutritivas y económicas. Por ejemplo, los aguacates de California están en su mejor momento de abril a julio.
- Incorporar vegetales en platillos favoritos: Newgent sugiere añadir champiñones finamente picados en las hamburguesas para aumentar el valor nutritivo sin afectar significativamente el sabor.
- Bayas como complemento: Según el Dr. Funk, consumir una taza de fresas con cada comida rica en proteínas animales puede mejorar indicadores de salud como el colesterol LDL y la presión arterial.
- Postres saludables: Newgent sugiere preparar crema de banana congelada en lugar de helado tradicional para obtener una alternativa saludable con beneficios nutricionales.
- Impacto en la salud: Dr. Funk afirma que una dieta basada en plantas puede ayudar a prevenir enfermedades como el cáncer, ataques cardíacos, diabetes y Alzheimer, contribuyendo a un microambiente corporal saludable.
Desde la mejora en la salud del corazón hasta la prevención del cáncer y las enfermedades crónicas, incorporar más alimentos de origen vegetal es una medida estratégica para una vida más saludable.