Cómo reconocer una arritmia cardíaca y quiénes son más propensos a sufrirla
El futbolista uruguayo Juan Izquierdo se desplomó en pleno partido el jueves pasado. Fue durante un encuentro de la Copa Libertadores entre su club Nacional contra San Pablo. Desde entonces se encuentra en terapia intensiva en un hospital de Brasil.
De acuerdo con los médicos que lo atendieron, Izquierdo ingresó con un “paro cardíaco, de inicio indeterminado, secundario a una arritmia”. Su estado de salud generó preocupación en la sociedad.
Según Sebastián Bauzá, el director Nacional de Deporte en Uruguay, el jugador Izquierdo había sido diagnosticado con una arritmia en un control que se le hizo hace 10 años cuando jugaba en Cerro y tenía 17 años, según informó el diario El Observador. Ahora tiene 27 años.
En diálogo con Infobae, el médico cardiólogo, Mario Fitz Maurice, jefe de Arritmias del Hospital Rivadavia de Buenos Aires y director de INADEA, comentó que aún hay poca consciencia sobre los riesgos de las arritmias en la población en general.
“Al menos una vez por año, los adultos deberían hacer una consulta médica. El profesional puede indicar un chequeo cardíaco”, afirmó.
“Las personas que están en mayor riesgo -aclaró el médico- son la que tienen hipertensión sin tratamiento, el colesterol alto, tener diabetes, enfermedades cardiovasculares crónicas, el consumo de alcohol y tabaco, y antecedentes familiares. Las arritmias pueden desencadenar o no episodios graves”.
¿Qué es una arritmia?
Una arritmia es un trastorno del ritmo del corazón, ya sea de manera rápida o lenta. Este trastorno se debe a una alteración en el origen del impulso y/o en la conducción, según la Fundación Cardiológica Argentina.
Las arritmias se pueden dividir en dos categorías: ventriculares y supraventriculares. Las arritmias ventriculares ocurren en las dos cámaras inferiores del corazón, que son los ventrículos.
En cambio, las arritmias supraventriculares ocurren en las estructuras por encima de los ventrículos, principalmente las aurículas, las dos cámaras superiores del corazón.
También las arritmias se definen por la velocidad de los latidos del corazón. Una frecuencia cardíaca muy lenta significa que la frecuencia cardíaca es inferior a 60 latidos por minuto y se conoce como “bradicardia”. En tanto, se llama “taquicardia es una frecuencia cardíaca muy rápida, lo que significa que el corazón late más rápido que 100 latidos por minuto.
La fibrilación, que es la forma más grave de arritmia, consiste en latidos rápidos y descoordinados, que son contracciones de las fibras individuales del músculo cardíaco.
¿Quiénes están en más riesgo de padecer arritmias?
Las personas que tienen estos factores de riesgo: las que consumen productos del tabaco, beben alcohol. consumen bebidas y alimentos con cafeína, y toman estimulantes como medicamentos para el resfriado o suplementos de hierbas.
También tener la tensión arterial alta sin control, un índice de masa corporal) superior a 30, la glucemia alta y haber desarrollado apnea del sueño son factores de riesgo de arritmia.
¿Qué causa una arritmia?
Algunas personas nacen con arritmias. En ese caso se trata de una condición es congénita. Algunas condiciones médicas, incluidos ciertos tipos de enfermedades cardíacas, presión arterial alta y hemocromatosis (acumulación de hierro en el cuerpo), pueden ser factores que favorecen el desarrollo de una arritmia.
Además, el estrés, la cafeína, el tabaquismo, el alcohol y algunos medicamentos de venta libre para la tos y el resfriado pueden afectar el patrón de los latidos del corazón.
¿Cuáles son los síntomas de una arritmia?
Los síntomas también dependen de la gravedad de la arritmia, la frecuencia con la que ocurre y la duración. Algunas arritmias no producen ningún síntoma. Las palpitaciones del corazón no siempre significan que tiene una arritmia.
Algunas señales de alerta de las arritmias son:
- Palpitaciones, es decir, latidos rápidos y desparejos perceptibles en el pecho o cuello
- Mareos
- Dolor torácico
- Pérdida de conciencia
- Disnea ( falta de aire)
Qué hay que hacer cuando se detecta una arritmia
Frente a las señales de alerta de arritmia lo primero que hay que hacer es llamar al 107 o al número local de emergencias médicas, según la Fundación Cardiológica Argentina.
Los profesionales que integran el sistema de emergencias llegan en ambulancia y están capacitados para reconocer estos síntomas y actuar rápidamente. Al evaluar el caso, el equipo de salud puede indicar el traslado al hospital para que el paciente reciba el tratamiento adecuado.
Se calcula que entre el 1,5% y el 5% de las personas padecen arritmias. Sin embargo, algunas personas no presentan síntomas, por lo que resulta difícil calcular cuántas personas padecen realmente arritmias.
¿Cómo se trata la arritmia?
El tratamiento depende del tipo y la gravedad de la arritmia. En algunos casos, no es necesario ningún tratamiento. Según la Clínica Cleveland de los Estados Unidos, las opciones de tratamiento de las arritmias cardíacas incluyen:
- Medicamentos
- Cambios en el estilo de vida
- Terapias
- Dispositivos
- Cirugía
Como cada paciente es diferente, es posible que tenga que probar varios medicamentos y dosis para encontrar el que mejor le funcione. Los tratamientos de la arritmia cardíaca incluyen fármacos antiarrítmicos que convierten la arritmia en ritmo sinusal (ritmo normal) o previenen una arritmia, entre oros.
¿Por qué importa el tratamiento de la arritmia?
Las arritmias que no se diagnostican o que no se tratan pueden causar complicaciones que afectan el corazón y el cerebro. De acuerdo con el Instituto Nacional del Corazón, los Pulmones y la Sangre, esas complicaciones pueden incluir:
- Insuficiencia cardíaca: las arritmias que ocurren en forma repetida causan miocardiopatía, lo que puede provocar insuficiencia cardíaca. Se trata de una afección seria que ocurre cuando el corazón no puede bombear suficiente sangre para satisfacer las necesidades del organismo.
- Problemas para pensar y con la memoria: la enfermedad de Alzheimer y la demencia vascular son más frecuentes en personas que tienen arritmias. Esto puede ser porque, con el tiempo, las arritmias pueden reducir el flujo sanguíneo al cerebro.
- Ataque cerebrovascular: con las arritmias, la sangre puede acumularse en las cámaras superiores del corazón, lo que provoca la formación de coágulos de sangre . Si un coágulo se desprende y se desplaza hasta el cerebro, puede causar un accidente cerebrovascular.
- Paro cardíaco súbito: las arritmias pueden hacer que el corazón deje de latir de manera súbita e imprevista.
- Síndrome de muerte súbita del lactante (SMSL): si nace con un tipo hereditario de arritmia, el bebé puede tener un mayor riesgo de SMSL.