La terapia ambulatoria CAR-T contra el cáncer puede ser segura y eficaz
MARTES, 1 de octubre de 2024 (HealthDay News) — Los pacientes con un cáncer de sangre de rápida propagación responden bien al tratamiento ambulatorio con terapia CAR-T, encontró el estudio más grande que examinó su uso en un entorno comunitario.
CAR-T es la abreviatura de terapia con receptores de antígenos quiméricos. En este tratamiento, los médicos extraen los glóbulos blancos del paciente, los modifican en un laboratorio y luego los vuelven a infundir en el paciente para atacar y matar las células cancerosas.
El nuevo estudio incluyó a 82 pacientes cuyo linfoma de células B grandes no había respondido al tratamiento o había regresado después de un período de remisión. La terapia CAR-T puede ser una opción de tratamiento eficaz en estos casos, pero seguir la terapia puede ser un desafío.
"Tradicionalmente, las células CAR-T han sido administradas por equipos de expertos en centros médicos universitarios, lo que por supuesto limita el acceso a esta terapia tan necesaria", señaló la investigadora principal, la Dra. Yuliya Linhares, jefa de servicios de linfoma del Instituto Oncológico de Miami. "Cuanto más tiempo tengan que esperar los pacientes para la administración de CAR-T, peores serán los resultados".
Los investigadores dijeron que los pacientes y los cuidadores con frecuencia deben viajar a centros lejos de casa para recibir tratamiento con CAR-T y asegurar una vivienda temporal. Debido a que deben ser monitoreados de cerca, se les aconseja que permanezcan a menos de una hora del centro de tratamiento.
El nuevo estudio, denominado OUTREACH, analizó la viabilidad de administrar la terapia CAR-T de forma ambulatoria.
El linfoma de células B grandes es un cáncer que afecta a un tipo de glóbulos blancos conocidos como linfocitos B. Puede propagarse rápidamente y es mortal si no se trata. La mayoría de las formas de cáncer responden bien a los tratamientos estándar.
Debido a que todos los participantes en este estudio ya habían recibido dos o más líneas de tratamiento previas, eran elegibles para recibir lisocabtagén maraleucel (Breyanzi), uno de los dos productos de células CAR-T aprobados. Los investigadores lo eligieron porque tiene un riesgo relativamente bajo de efectos secundarios graves.
Casi tres cuartas partes de los centros médicos que participaron en el estudio nunca habían tratado a pacientes con terapia CAR-T.
Al final, el 70% de los participantes del estudio recibieron la terapia de forma ambulatoria. De ellos, una cuarta parte nunca fueron hospitalizados. De los que sí fueron al hospital, seis días fue la estancia media para los tratados de forma ambulatoria, lo que significa que la mitad tuvo estancias más cortas y la otra mitad más largas. Aquellos que recibieron células CAR-T como pacientes hospitalizados tuvieron una estadía de 15 días.
Aproximadamente la mitad de los participantes tuvieron una reacción leve al tratamiento llamada síndrome de liberación de citocinas. Los síntomas son similares a los de la gripe. Las tasas de eventos de neurotoxicidad, que varían en gravedad desde una confusión leve hasta convulsiones y alucinaciones, fueron bajas. Los investigadores dijeron que estaban en línea con los observados en otros ensayos.
Añadieron que esto indicaba que los pacientes no se enfrentaban a un mayor riesgo, tanto si recibían tratamiento ambulatorio como si recibían tratamiento en un hospital comunitario.
Los hallazgos se publicaron en la edición del 30 de septiembre de la revista Blood Advances, una revista de la Sociedad Americana de Hematología (American Society of Hematology).
"Animo a tantos sitios como sea posible a que trabajen en la creación de programas de células CAR-T", planteó Linhares en un comunicado de prensa de la revista. Añadió que los protocolos bien delineados y la amplia formación del personal son esenciales para garantizar que cualquier complicación se detecte y se aborde rápidamente.
Dijo que más investigación podría ayudar a definir qué pacientes son los más adecuados para la atención ambulatoria en comparación con el tratamiento hospitalario.
El estudio fue financiado por Bristol Myers Squibb, fabricante de Breyanzi.
Más información
La Sociedad Americana Contra El Cáncer (American Cancer Society) ofrece más información sobre la terapia CAR-T.
FUENTE: Sociedad Americana de Hematología, comunicado de prensa, 30 de septiembre de 2024