Los gobernadores quieren anticipar los acuerdos del Pacto del 25 de Mayo y ponen en duda el apoyo a los superpoderes
El grupo de WhatsApp que tiene como administrador a Axel Kicillof, y en el que opinan e interactúan 22 de los 23 gobernadores, retomó la actividad luego de que Javier Milei anunciara la convocatoria para firmar un documento con 10 puntos el próximo 25 de Mayo.
El Presidente convocó a los gobernadores para rubricar un documento en donde el Gobierno establece un decálogo de normas a cumplir pero, previamente, establece condiciones en donde aparece nuevamente la aprobación de la ley ómnibus. Como moneda de cambio, propone un nuevo acuerdo fiscal para las provincias. Todo atado a la aprobación del megaproyecto.
Este anuncio sorprendió a los gobernadores que vienen acumulando cansancio en la conversación con el Gobierno nacional que “juega al policía bueno con el ministro del Interior y después sale Milei y nos dice degenerados fiscales y nos pisa los fondos”.
Lo que en público se dice no es lo mismo que se repite en privado. Frente a los micrófonos, los gobernadores más cercanos al gobierno señalan y aplauden el llamado a un pacto, asegurando que hay coincidencia con los 10 puntos y celebran el llamado al diálogo. En reserva y fuera de micrófono, se muestran distantes y algunos de ellos no comprometen el apoyo de sus legisladores para la ley ómnibus.
“No podes decir que no vas a ir cuando te invitan, pero la verdad es que la desconfianza es mutua”, explicó un gobernador de los denominados “dialoguistas”. El tono en el que Milei lo presentó no cayó bien y no solo a los gobernadores del peronismo, sino que tampoco a alguno de los propios. “Lo propuso a todo o nada. Si no me dan, no les doy. Después de pedirnos eso, dice que no confía en nosotros, es un poco cansador el trato”, explicó otro de los que estuvo presente en la Asamblea Legislativa en el Congreso de la Nación.
Con diferencias, con matices, pero todos en la misma línea señalan que el 25 de mayo queda “muy lejos” y que es necesario soluciones ahora. Así lo expresó el gobernador de Córdoba, Martín Llaryora, quien saludó la apertura de un posible diálogo pero hizo referencia que “hacen falta respuestas en el corto plazo”.
En la misma línea lo hizo su par de Chubut, Ignacio Torres, quien señaló que es necesario soluciones en el corto plazo y que se debatirá el acuerdo del 25 de Mayo.
Pero Milei quiere la Ley Ómnibus y ya dejó en claro que la capacidad de negociación que muestra el Gobierno nacional tiene una tolerancia muy baja. Y en ese esquema, y luego de las últimos chispazos con los gobernadores, es probable que tenga el mismo destino que en la primera oportunidad.
“Nadie quiere darle superpoderes a Milei y mucho menos ahora. No solo los peronistas que uno podría creer que naturalmente se iban a oponer; tampoco lo quieren los radicales y mucho menos los partidos provinciale”, confió a Infobae una fuente que miró el chat.
Un ejemplo de esto es lo que sucedió con los gobernadores patagónicos que, aunque representan a diferentes fuerzas que van desde el PRO, pasando por el Movimiento Popular Neuquino y llegando al peronismo, todos se pararon en la misma vereda.
Ignacio Torres (Chubut), Sergio Ziliotto (La Pampa), Rolando Figueroa (Neuquén), Alberto Weretilneck (Río Negro), Claudio Vidal (Santa Cruz) y Gustavo Melella (Tierra del Fuego, Antártida e Islas del Atlántico Sur), definieron que no van a quemar los puentes, pero tampoco firmarán nada a libro cerrado. En paralelo, en pocos días tendrán una foto de unidad en el parlamento patagónico, lugar al que no irá Milei.
“El grupo se activó, veremos cómo sigue todo pero por ahora el oficialismo no tiene la ley que quiere y si sigue en esta línea de látigo sin billetera menos posibilidades tandrá. En el momento en el que los dialoguistas le ofrecieron una salida, la Casa Rosada se negó y se radicalizó. Hoy, en principio, no está esa salida”, agregó.