En febrero los salarios del sector público le ganaron a la inflación
Los ingresos de los asalariados del sector públic aumentaron en promedio 15,1% en febrero pasado, con lo que superaron por 1,9 puntos porcentuales a la inflación de ese mes, según el último informe publicado por el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos (Indec).
Sin embargo, no todos los trabajadores lograron vencer al Índice de Precios al Consumidor (IPC). Cuando se desglosa el 13,3% promedio de incremento salarial, se encuentra que los trabajadores informales en realidad quedaron muy lejos de las variaciones de precios. De acuerdo con los datos publicados por el organismo, los empleados del sector privado no registrado tuvieron un ajuste salarial del 5,7% en febrero pasado; es decir que perdieron por 7,5 puntos porcentuales contra la inflación de ese mes, que fue del 13,2%.
Ocurrió lo opuesto con los asalariados formales. Los trabajadores del sector privado registrado tuvieron un aumento salarial promedio del 14,1%, mientras que los empleados del sector público lograron un incremento del 15,1%, por lo que ambos superaron a la inflación y recuperaron parte del poder adquisitivo perdido.
Largo camino por delante
Si bien en términos generales los asalariados lograron vencer a la inflación en febrero, aún queda un largo camino por recorrer para recuperar el poder adquisitivo perdido en los meses anteriores.
Si se analizan los números de largo plazo, se observa con facilidad que el poder adquisitivo de los trabajadores está muy lejos del nivel que tenían hace un año. En detalle, los salarios de los trabajadores privados formales avanzaron 225,4% entre febrero de 2023 e igual mes de 2024. En ese mismo período, el IPC aumentó 276,2%, lo que significa que los sueldos perdieron por 50,8 puntos porcentuales contra la inflación.
Es peor aún la situación de los empleados del sector público, cuyos salarios avanzaron 197,2% en el transcurso de los doce meses. Los asalariados informales, en tanto, tuvieron un aumento total del 121,5% en ese período.
Más cerca de la pobreza
Los números mencionados hasta el momento demuestran que, pese a la mínima recuperación lograda por los salarios formales en febrero, los sueldos siguen perdiendo por mucha diferencia contra el IPC. No obstante, es mucho mayor al diferencia que existe con las canastas básicas, lo que claramente ejerce una alta presión sobre los niveles de pobreza.
En detalle, el Indec señala que la Canasta Básica Total (CBT) aumentó 290,2% en los últimos doce meses, un valor que supera por 89,8 puntos a la suba promedio que tuvieron los salarios en ese período. No es un dato menor, teniendo en cuenta que la CBT mide el total de gastos que debe hacer una familia para cubrir el 100% de sus necesidades durante un mes. Es por eso que las familias con ingresos inferiores a una CBT son técnicamente consideradas pobres.
En ese contexto, se entiende que mientras más rápido avancen los precios de la Canasta Básica Total en relación a los salarios, más personas caerán bajo la línea de la pobreza.
La misma situación se repite con la Canasta Básica Alimentaria (CBA), herramienta estadísticas que mide el total de gastos que debe hacer una familia tipo para cubrir el 100% de sus necesidades alimenticias durante un mes. En este caso, la CBA acumuló un incremento del 301,1% en los últimos doce meses, contra el 200,4% promedio de los salarios. Eso quiere decir que el costo de los alimentos esenciales para la vida de una familia aumentó 100,7 puntos por encima de los sueldos de los trabajadores. Es importante aclarar que, las familias cuyos ingresos no llegan a una CBA, son técnicamente consideradas indigentes.
En ambos casos, claro está, los más afectados fueron los trabajadores informales, dado que sus ingresos subieron sólo 121,5% en el período analizado.