Ley Bases: el Gobierno encara las negociaciones con la hipótesis de que tiene 34 votos en contra en el Senado
Tras el largo camino que recorrió el proyecto y que derivó en un texto que tuvo el suficiente consenso como para ser aprobado en la Cámara de Diputados, el Gobierno encara ahora las negociaciones por la Ley Bases en el Senado, donde el contexto es más adverso para el oficialismo.
De acuerdo con lo que confirmaron fuentes parlamentarias a Infobae, las reformas impulsadas por el Poder Ejecutivo comenzarán a ser tratadas en las correspondientes comisiones el martes próximo y el objetivo es que para el jueves ya haya dictamen.
Por un lado, a la mañana se debatirá el paquete fiscal en la comisión de Presupuesto y Hacienda, mientras que por la tarde se conformará un plenario que también integrarán Asuntos Constitucionales y Legislación General, para analizar la Ley Bases.
En la Cámara alta, la iniciativa no cuenta con tanto respaldo previo de la oposición como en Diputados y la votación, en principio, sería más peleada. Para encarar esta situación, el Gobierno se planteó que inicia con, al menos, 34 votos en contra: todos los integrantes de lo que era Unión por la Patria (los bloques Unidad Ciudadana y Frente Nacional y Popular) y el radical y líder de Evolución, Martín Lousteau. Si bien esto no fue confirmado por el ex ministro de Economía, en Casa Rosada prefieren contarlo como un voto negativo.
La intención de las autoridades nacionales y de los referentes de La Libertad Avanza en el Senado es tratar de convencer a algunos de esos legisladores para que cambien de posición antes de que los textos sean debatidos en sesión ordinaria.
Si el oficialismo consigue el dictamen el jueves, recién siete días más tarde -por reglamento- se podría convocar al tratamiento en el recinto, por lo que recién el 16 de mayo empezaría la etapa final del proceso parlamentario, si es que no ocurre ningún imprevisto.
Cualquier cambio sobre los proyectos que obtuvieron media sanción en Diputados, ya sea la modificación de un artículo o la eliminación directa de cualquiera de ellos, implicaría que la iniciativa regrese a la Cámara de origen, algo que el Poder Ejecutivo quiere evitar.
El presidente Javier Milei busca tener las reformas aprobadas por el Congreso antes del Pacto de Mayo, pero algunos puntos que siguen siendo cuestionados por un sector de la oposición “dialoguista”, como la restitución de Ganancias o el impuesto al tabaco, amenazan con derribar esas expectativas.
En este marco, en Balcarce 50 remarcan que será fundamental a la hora de la votación la posición que tomarán aquellos senadores que responden a los gobernadores peronistas que ya se expresaron a favor de la ley, como Osvaldo Jaldo, de Tucumán, y Raúl Jalil, de Catamarca.
De hecho, el jueves pasado el ministro del Interior, Guillermo Francos, recibió en la Casa Rosada al primero de ellos para conversar “sobre la necesidad de avanzar con la modernización del aeropuerto” de su provincia, “la implementación de la tarjeta SUBE y las problemáticas vinculadas a la producción de limón”.
Previo a ese encuentro, el mandatario tucumano publicó en su cuenta de X un extenso mensaje en el que aseguró que acompañaba “la posición política institucional” de su par catamarqueño y le pidió a la oposición “ser responsables” y “trabajar en conjunto con el Gobierno Nacional”.
“Desde las provincias buscamos generar espacios que puedan mejorar la gobernabilidad del país y que estas acciones redunden en beneficio de cada una de las provincias argentinas. Son tiempos de dejar diferencias personales y políticas para ayudar a sacar adelante a la Patria”, agregó.
Por su parte, Jalil se reunió el martes último con el ministro de Economía de la Nación, Luis “Toto” Caputo, y luego de eso, en declaraciones radicales, el dirigente peronista afirmó que “es muy importante” el aval del Senado a las reformas del oficialismo.
En diálogo con este medio, fuentes cercanas a las negociaciones parlamentarias destacaron “la generosidad política” del mandatario de Catamarca, al que calificaron como “una persona que piensa en el bien del país y no en el propio”.
No obstante, el reclamo del gobernador ya fue rechazado por la senadora de su provincia Lucía Corpacci, quien anticipó su probable rechazo a los proyectos, aunque aclaró que terminará de definir su voto “después de que el proyecto entre” a la Cámara y pueda leerlo en profundidad.
En el oficialismo, sin embargo, confían en que el también peronista catamarqueño Guillermo Andrada, del Frente Nacional y Popular, sí apoye las iniciativas, al igual que la tucumana Sandra Mariela Mendoza, que aunque no responde a Jaldo, tampoco lo sigue a su compañero de banca Juan Manzur, uno de los opositores más duros a la gestión de Milei.
Los tiempos apremian y a las autoridades nacionales les quedan exactamente tres semanas para el 25 de mayo, fecha en la que está previsto que se realice la firma del pacto a la que, como anticipó el propio Presidente, serán invitaos todos aquellos gobernadores que hayan apoyado la Ley Bases y el paquete fiscal.