Qué es la bioestimulación, el secreto estético para una piel más joven y brillante
Cómo rejuvenecer tu rostro de la manera más natural posible, para que la piel luzca tersa y brillante: hoy te voy a contar qué son los bioestimuladores.
La bioestimulación emerge como una alternativa segura y eficaz para aquellos que buscan métodos no invasivos para rejuvenecer su rostro, ya que este tratamiento estimula los propios componentes de la piel sin necesidad de inyectar componentes externos.
En la actualidad, muchos pacientes siente temor de desfigurar su rostro debido al uso de rellenos. Sin embargo, un aspecto muy importante de la biostimulación es que promueve componentes propios de la piel, como son el ácido hialurónico, el colágeno y la elastina. Dicho de otro modo, es un tratamiento que, mediante la inyección de productos determinados y preparados para ese fin, buscan bioestimular tu colágeno. ¿Cuál es la función de cada componente?
El rol del ácido hialurónico (HA) en el organismo es multifacético, ya que regula diversos procesos biológicos, entre los que se encuentran la reparación de la piel y la regeneración de tejidos. Debido a este notable potencial biomédico, se emplea como uno de los componentes imprescindibles de los productos cosméticos y nutricosméticos, siendo que diversos estudios científicos lograron demostrar una eficacia nutricosmética.
En tanto, la elastina es un componente crucial del tejido conectivo en la vida, ya que es responsable de la integridad estructural y la función de los tejidos, según señalan desde la Biblioteca de Salud de los Estados Unidos (PubliMed). “La estabilidad estructural, la resiliencia elástica, la bioactividad y la capacidad de autoensamblaje hacen de la elastina un candidato muy deseable para la fabricación de biomateriales”, explican.
Por último, el colágeno son moléculas de proteínas formadas por aminoácidos, las cuales brindan un soporte estructural al espacio extracelular de los tejidos conectivos; siendo que esta componente natural se puede dividir en varios grupos según el tipo de estructuras que forman. Debido a su “rigidez y resistencia al estiramiento, es la matriz perfecta para piel, tendones, huesos y ligamentos”, aseguran desde el Centro Nacional de Biotecnología de los Estados Unidos.
Al lograr esta bioestimulatión, el resultado es una piel más joven, más fresca y mucho más tensa, generando un cambio natural de antienvejecimiento en tu piel. Incluso, con este método, todos de los componentes de la piel que se van perdiendo con el envejecimiento se recuperan e, incluso, también se logra retrogradar un poco el daño solar de la piel.
Se lo puede realizar cualquier persona, salvo que se encuentre embarazada. Este tratamiento se usa a partir de los 35 años, porque entre los 35 y los 40 años se pierde un 25% del colágeno. Por eso, lo ideal es empezar a esta edad para prevenir esa pérdida, siendo que se logra, incluso, un rejuvenecimiento facial. Es un antiage supernatural, sin rellenar la cara o poner hilos tensores.
Se realiza mediante una inyección y es muy rápido. Además, se hace en el consultorio y cambia un montón la cara. Se tarda no más de 15 minutos, es con anestesia local y prácticamente indoloro. A los 40 minutos de que se fue la anestesia, el paciente ya está normal: se puede ir al domicilio, al gimnasio o a una fiesta, porque puede hacer una vida totalmente normal y con cero riesgo de complicaciones.
Es más, si bien enfocamos el tratamiento en lo facial, la bioestimulación es un tratamiento que puede realizarse en otras áreas del cuerpo, como son los glúteos, el abdomen y las piernas.
*El Dr. Daniel Félix es cirujano plástico, M.N 85381, con 30 años de trayectoria, encargado de Dr. Beauty.