Gesto del Gobierno al campo: el BCRA accedió a un pedido del sector y derogó una norma que encarecía el crédito
El Banco Central informó que no se renovará la circular emitida durante la gestión anterior que impone un mínimo en la tasa de financiamiento bancario a la que pueden acceder productores cuando mantienen un stock de soja superior a 5% de su producción.
La norma, promulgada en septiembre de 2022, vence el 30 de este mes y fija un piso equivalente al 120% de la tasa de Política Monetaria. El objetivo de la norma era que, en un contexto de permanentes expectativas devaluatorias, los productores tuvieran la mayor cantidad de incentivos posibles a liquidar o, mejor dicho, se vieran económicamente perjudicados lo máximo posible en caso de retener granos.
“Esta decisión constituye un paso más en el camino trazado por el BCRA con miras a normalizar el funcionamiento del sistema financiero y fomentar el crédito doméstico al sector privado productivo”, indicó el Central en el comunicado.
Según explicó la autoridad monetaria, esta adecuación normativa complementa otras medidas como la Comunicación A8043 del pasado 13 de junio, por la cual se flexibilizó las normas de crédito para el conjunto de entidades que califican como Grandes Empresas Exportadoras (GEE). En virtud de esa flexibilización se eliminaron restricciones al financiamiento en moneda extranjera, junto a otras medidas en el mismo sentido.
“A medida que el BCRA avanza en la recuperación de la estabilidad macroeconómica, sus autoridades seguirán evaluando opciones para flexibilizar regulaciones distorsivas y discriminatorias, con el fin de facilitar el redireccionamiento del crédito bancario desde el sector público al sector privado productivo”, indicó la autoridad monetaria en un comunicado.
Más allá del vencimiento de la norma, la medida se adopta cuando todas las miradas están puestas en el volumen de liquidación del agro que resultó, en las últimas semanas, en el marco del promedio habitual pero por debajo de los años récord inmediatamente previos a la sequía de 2023 y también menor a las expectativas de una “lluvia de dólares” que permitiera recomponer reservas a mayor velocidad.
Por su parte, la Bolsa de Comercio de Rosario celebró la decisión del BCRA de no renovar “la norma que discriminaba a productores de soja” para acceder al financiamiento bancario. “Estamos convencidos de que el campo tiene un gran potencial de desarrollo y para ello es necesario quitar las trabas que lo impiden”, indicó la entidad en un breve posteo en la red X. A su vez, el ministro de Economía, Luis Caputo, respondió ese mensaje: “Seguimos desarmando el entramado nefasto heredado”, escribió en clara alusión al gobierno anterior.
La medida también había sido solicitada por la Asociación de la Cadena de la Soja (ACSOJA) quien mediante un comunicado reciente había pedido que “no se renueve la medida del Banco Central respecto a los créditos para productores. Teniendo en cuenta el inminente vencimiento de la prórroga establecida sobre la Comunicación “A”7931 que establece un recargo en la tasa a los productores de trigo y soja con más del 5% en existencias es que solicitamos la derogación definitiva de una medida financiera que atenta contra el desarrollo de todo el sector” afirmó en su momento la entidad sojera.
La asociación consideró que el crédito es fundamental para el desarrollo de la actividad productiva y no facilitar el acceso a esta herramienta impacta negativamente en el potencial de producción, restringiendo la inversión.
La decisión del Banco Central también fue aplaudida por los analistas del mercado, donde se destacó el “castigo” que representaba la norma para los productores. Sin embargo, consideraron que tomadas aisladamente medida por medida, la mejora relativa es menor. “Medida más que positiva, menos distorsiones y castigo al principal productor de transables local. -sostuvo el economista Gabriel Caamaño respecto de la norma del BCRA- El tema es que ir desmontando de una en una (las normas) te mete en (escenario) second best world (mejor pero debajo del ideal). Sería mejor un enfoque más integral y sistemático. Pero es lo que hay”, criticó al mismo tiempo.