Cómo funciona el nuevo medicamento estrella que ralentiza el avance del Alzheimer
En las últimas horas, la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA, en inglés) aprobó el uso de un nuevo medicamento, denominado como donanemab, que ralentiza el avance de la enfermedad de Alzhéimer. Bajo el nombre comercial Kisunla™, este fármaco está destinado a pacientes con un deterioro cognitivo moderado o con demencia leve, para ser administrado en el tratamiento temprano de la patología.
De acuerdo a datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), en todo el mundo, más de 55 millones de personas viven con demencia, siendo que “la enfermedad de Alzheimer es la forma más común” y “puede contribuir al 60-70% de los casos”, siendo que en 2030 el número de afectados podría aumentar a 78 millones.
El medicamento, desarrollado por la farmacéutica Eli Lilly, “ralentizó el deterioro cognitivo y funcional hasta en un 35% en comparación con placebo a los 18 meses en su estudio fundamental de fase 3 y redujo el riesgo de los participantes de progresar a la siguiente etapa clínica de la enfermedad hasta en un 39%”, señaló el laboratorio en un comunicado de prensa. Vale destacar que este fármaco no cura la patología, sino que ralentiza su progresión.
Al tiempo que se indicó que se trata de la “primera y única terapia dirigida a la placa amiloide que utilizó un régimen de tratamiento de duración limitada basado en la eliminación de la placa amiloide; casi la mitad de los participantes del estudio completaron su tratamiento en 12 meses”. “Las infusiones mensuales de 30 minutos redujeron las placas amiloides en un promedio del 84 % en comparación con el inicio del estudio”, agregó.
En ese sentido, indicaron que es un tratamiento destinado “para adultos con enfermedad de Alzheimer (EA) sintomática temprana, que incluye personas con deterioro cognitivo leve (DCL), así como personas con la etapa de demencia leve de la EA, con patología amiloide confirmada”, siendo que esta droga “se administra una vez al mes”.
Donanemab: cómo funciona este nuevo fármaco
Según explicaron desde el laboratorio, este fármaco “ataca las placas amiloides, que se forman por la acumulación de proteínas producidas naturalmente por el cuerpo, que están vinculadas con varias dolencias como Alzhéimer, Parkinson, así como otras enfermedades neurológicas”, ya que “la acumulación excesiva de placas amiloides en el cerebro puede provocar pérdidas de memoria y otros problemas asociados”.
Al ser consultada por Infobae, la doctora Celeste Beltramini, especialista en Neurología en la Unidad de Neurología Cognitiva de la Clínica Universitaria Reina Fabiola de Córdoba, analizó la reciente aprobación y explicó: “El Donanemab es un anticuerpo monoclonal que está dirigido a evitar la acumulación de beta amiloide en el cerebro”.
“En los estudios, eliminó mejor las placas amiloides que aducanumab (Aduhelm) y lecanemab (Leqembi), también anticuerpos monoclonales de reciente aparición, y redujo las concentraciones de proteína tau en sangre”, señaló la experta y analizó los resultados del ensayo clínico e indicó: “Los pacientes experimentaron un 40% menos de riesgo de pasar de deterioro cognitivo leve a demencia leve, o de demencia leve a moderada”.
En ese sentido, la doctora B. Joy Snider, profesora de neurología en la Facultad de Medicina de la Universidad de Washington, explicó a The New York Times que la desaceleración del deterioro “no era una gran diferencia”, pero podría ser significativa en la vida de las personas. Asimismo, quien participó en ensayos de los fármacos y anteriormente se desempeñó como consultora, agregó: “Al menos a nivel de grupo, la eliminación de amiloide se correlaciona con la desaceleración de la progresión de la enfermedad”.
Y concluyó: “Va a ser difícil ver estas correlaciones en un paciente individual”, ya que los problemas de memoria y pensamiento pueden fluctuar: “No sabes si está teniendo un buen día o un mal día”.
“Es un medicamento de alto costo, con beneficios leves y sin cambios finales sobre la enfermedad (hasta ahora) y con efectos secundarios graves. Podría pensarse que puede ser útil en pacientes con mutaciones genéticas preseniles, que son los casos menos frecuentes, pero con más beta-amiloide”, señaló a Infobae el médico neurólogo y decano de la Facultad de Medicina de la Universidad de Buenos Aires (UBA), Luis Ignacio Brusco.
El doctor Ronald Petersen, neurólogo y director del Centro de Investigación de la enfermedad de Alzheimer de la Clínica Mayo, había indicado en un artículo publicado por el renombrado centro de salud norteamericano, que “el donanemab es un fármaco que reduce una de las proteínas que definen la enfermedad de Alzheimer en el cerebro, la proteína amiloide”.
“Hoy por hoy, los tratamientos más novedosos que se encuentran comercializándose son los destinados a eliminar beta amiloide”, había indicado en una nota reciente a Infobae, el neurólogo Santiago Tizio, jefe del área de Neurología del Hospital Español de La Plata.
Y agregó: “Desde el punto de vista fisiopatológico, el Alzheimer, que es una enfermedad neurodegenerativa, se caracteriza por la acumulación de placas de beta amiloide y también por la presencia de ovillos neurofibrilares de proteína TAU, que en condiciones normales está en las neuronas y participa en la estabilidad del citoesqueleto, es decir, del esqueleto celular, que está compuesto por proteínas y por agregados proteínicos que se llaman microtúbulos. Esos microtúbulos, además de tener una función estructural, cumplen una función en el transporte de moléculas de un lugar a otro”.
En tanto, el doctor Alejandro Andersson, médico neurólogo y director médico del Instituto de Neurología Buenos Aires (INBA), explicó a Infobae: “El donanemab se mete en el cuerpo, entra al sistema nervioso y en el cerebro se pega a las placas amiloides. La unión del donanemab las placas de beta amiloide activa a una parte de la glía, que son células que sostienen a las neuronas, o sea, están en el tejido nervioso. ¿Cuáles son las células de la glía? Los oligodendrocitos que forman la sustancia blanca, la mielina”.
Y continuó: “Los astrocitos que le dan de comer la nutrición a las neuronas y los microcitios que son los que son los que defienden a las neuronas y el tejido nervioso. Los microcitios ven un virus, ven una bacteria, ven algo extraño y lo atacan La formación del complejo entre el donanemab y la placa amiloide, es reconocida por el micrositio, que lo que hace es comérselo y degradar la placa amiloide. La eliminación de las placas de beta amiloide ayuda a reducir la neurotoxicidad asociada a estas acumulaciones. Y al reducir la carga de amiloide, se espera que mejore la función sináptica, la salud del sistema nervioso central y del cerebro”.
En el comunicado de prensa, desde el laboratorio indicaron que el ”amiloide es una proteína producida naturalmente en el cuerpo que puede agruparse para crear placas amiloides.
La acumulación excesiva de placas amiloides en el cerebro puede provocar problemas de memoria y pensamiento asociados con la enfermedad de Alzheimer. Kisunla™ puede ayudar al cuerpo a eliminar la acumulación excesiva de placas amiloides y retrasar el deterioro que puede disminuir la capacidad de las personas para recordar nueva información, fechas importantes y citas; planificar y organizar; preparar comidas; usar electrodomésticos; administrar las finanzas; y estar solo”.
Donanemab: los detalles del ensayo clínico de Fase III
En ese sentido, explicaron que en el estudio de Fase III, denominado TRAILBLAZER-ALZ 2, “las personas que estaban en una etapa menos avanzada de la enfermedad experimentaron los mejores resultados”. Según indicaron, los participantes fueron analizados durante 18 meses en dos grupos: uno en una etapa menos avanzada (con niveles bajos a medios de proteína tau) y la población general, que también incluía a pacientes con niveles altos de tau.
“El tratamiento con Kisunla™ ralentizó significativamente el deterioro clínico en ambos grupos”, afirmaron. Y resaltaron: “Los individuos que estaban en una etapa menos avanzada de su enfermedad mostraron una desaceleración significativa del deterioro del 35% en comparación con placebo”, mientras que en “la población general, la respuesta al tratamiento también fue estadísticamente significativa”. Según detallaron, entre los dos grupos analizados, los participantes tratados con este nuevo fármaco tuvieron hasta un 39% menos de riesgo de progresar a la siguiente etapa clínica de la enfermedad que los que tomaron placebo.
Asimismo, resaltaron que entre la población general, este fármaco “redujo las placas amiloides en un promedio del 61% a los 6 meses, del 80% a los 12 meses y del 84% a los 18 meses en comparación con el inicio del estudio”, siendo que “uno de los objetivos del tratamiento del estudio era eliminar las placas amiloides a niveles mínimos compatibles con una exploración visualmente negativa mediante tomografía por emisión de positrones (PET) para amiloide”.
“El ensayo inscribió a 1.736 participantes, en 8 países, seleccionados en función de evaluaciones cognitivas, junto con evidencia de patología de la enfermedad de Alzheimer”, resaltaron desde la pharma. Y destacaron que los resultados del estudio TRAILBLAZER-ALZ 2 se publicaron en la Revista de la Asociación Médica Estadounidense (JAMA).
Sin embargo, esta droga aún continúa siendo estudiada en otros ensayos clínicos, como “TRAILBLAZER-ALZ 3, que se centra en prevenir la enfermedad de Alzheimer sintomática en participantes con EA preclínica; TRAILBLAZER-ALZ 5, un ensayo de registro para EA sintomática temprana y TRAILBLAZER-ALZ 6, que se centra en ampliar nuestra comprensión de anomalías en las imágenes relacionadas con los amiloides, o ARIA, a través de nuevas secuencias de resonancia magnética, biomarcadores basados en sangre y diferentes regímenes de dosificación”.
Siendo que, basándose en los datos del ensayo, esta droga retrasaría la progresión una media de 7,5 meses, en comparación con el placebo.
Donanemab: cuáles son los efectos secundarios
Según explicaron desde la pharma, este tratamiento presenta advertencias importantes de seguridad. Uno de los efectos secundarios más graves es la aparición de anomalías en las imágenes relacionadas con el amiloide (ARIA), que puede ser mortal, ya que esta condición se manifiesta comúnmente como hinchazón temporal en el cerebro y, en ocasiones, con manchas de sangrado.
Asimismo, advirtieron que las personas con el gen de la apolipoproteína E ε4 homocigotos tienen un mayor riesgo de desarrollar ARIA. Además, aquellos que toman medicamentos antitrombóticos deben tener especial precaución debido al riesgo de sangrado cerebral.
“Algunas personas también pueden tener manchas de sangrado en la superficie o en el interior del cerebro y, con poca frecuencia, pueden aparecer áreas más grandes de sangrado en el cerebro. Aunque la mayoría de las personas no presentan síntomas, algunas personas tienen dolor de cabeza, mareos, náuseas, dificultad para caminar, confusión, cambios en la visión y convulsiones”, detallaron en el comunicado de prensa.
Según se desprende del comunicado, aproximadamente una cuarta parte de los pacientes que recibieron donanemab experimentaron hinchazón o sangrado en el cerebro. Aunque la mayoría de los casos fueron leves o asintomáticos, alrededor del dos por ciento fueron graves.
Por último, desde el laboratorio indicaron que “puede causar reacciones alérgicas graves y reacciones relacionadas con la infusión”, siendo que “los síntomas pueden incluir hinchazón de la cara, labios, boca o párpados, problemas para respirar, urticaria, escalofríos, irritación de la piel, náuseas, vómitos, sudoración, dolor de cabeza o dolor en el pecho”.