Cómo identificar que una página web es falsa: evita caer en fraudes millonarios
Navegar por internet es una actividad cotidiana para millones de personas alrededor del mundo, pero no todas las páginas web de Google Chrome u otros buscadores son seguras; muchas están diseñadas para engañar a los usuarios, robar información personal y grandes sumas de dinero, o incluso infectar los dispositivos con software malicioso.
Varias autoridades han lanzado advertencias sobre los peligros de la web, siendo la Guardia Civil y el Instituto Nacional de Ciberseguridad (INCIBE), en España, entidades que alertan sobre los riesgos asociados con aquellos sitios que no utilizan conexiones seguras, es decir, que no emplean el protocolo HTTPS.
Aunque parezca una tarea sencilla, visitar sitios web que prometen aplicaciones gratuitas o contenido multimedia de plataformas streaming pagas, puede ser un canal para que los usuarios terminen estafados.
Por qué no se debe navergar en una conexión no segura
Los sitios web que no usan HTTPS pueden comprometer la información sensible que los usuarios ingresan, incluyendo datos personales y financieros. HTTPS, que significa HyperText Transfer Protocol Secure, es una versión segura de HTTP, el protocolo a través del cual se transmiten los datos entre el navegador y el sitio web.
Utilizar HTTPS significa que toda la comunicación entre un navegador y el sitio web está cifrada, lo que protege los datos de posibles interpretaciones malintencionadas.
Cuáles son las amenazas presentes en internet
Las amenazas en internet son diversas y pueden estar ocultas en lugares que parecen inofensivos. Entre estos peligros se encuentran el malware, troyanos y otros tipos de programas dañinos que pueden comprometer la seguridad del dispositivo electrónico.
Este tipo de amenazas se encuentran frecuentemente en sitios que prometen descargas gratuitas de software, películas, música o juegos. A pesar de su atractivo, estos sitios están frecuentemente repletos de peligros.
INCIBE ha advertido que muchas de estas páginas esconden virus y otras amenazas informáticas que pueden poner en riesgo tanto dispositivos móviles como ordenadores.
Es fundamental estar informado sobre estos riesgos, debido a que un simple clic en un enlace malicioso, puede tener consecuencias devastadoras para la seguridad de tu información y la integridad de tus dispositivos.
Cómo evitar ser estafado cuando navegas en internet
Afortunadamente, la mayoría de los navegadores actuales han implementado medidas de seguridad que alertan a los usuarios antes de acceder a sitios sospechosos.
Mensajes como “La conexión no es privada” son una señal de que la página visitada podría ser peligrosa. Estos avisos son esenciales para mantener la seguridad en un entorno digital cada vez más complejo y lleno de amenazas.
Junto a confiar en estos avisos, los usuarios deben ser proactivos en su defensa contra los peligros en internet. Uno de los consejos más importantes para mantener tu información segura es evitar ingresar datos en páginas que no utilicen HTTPS.
Del mismo modo, este protocolo asegura que la conexión entre el usuario y la página web es privada, protegiendo así los datos que se comparten.
Medidas para una navegación segura en internet
Además de verificar que las páginas web en el navegador utilicen HTTPS, existen otras prácticas recomendadas para que los usuarios se protejan en la red virtual:
- Hay que verificar que el sistema operativo, navegadores y programas antivirus estén actualizados. Las actualizaciones suelen incluir parches de seguridad que corrigen vulnerabilidades.
- Emplear una variedad de contraseñas complejas y diferentes para cada cuenta reduce el riesgo de que todas las cuentas sean comprometidas en caso de que una sea hackeada.
- Los correos electrónicos de phishing son una táctica común utilizada para obtener información personal. Nunca hacer clic en enlaces ni descargar archivos adjuntos de correos electrónicos que no esperabas.
- Considerar el uso de complementos de navegador y software que bloquean anuncios y scripts maliciosos.
- Estar informado sobre las últimas amenazas y aprender sobre las mejores prácticas para la ciberseguridad.
Tanto las instituciones como los usuarios deben tomar medidas para proteger la información personal y financiera. Las autoridades competentes alrededor del mundo continuarán advirtiendo sobre los riesgos cibernéticos, pero la última línea de defensa es siempre el propio usuario.