Así se vería una película de la Bella y la Bestia hecha con inteligencia artificial
La inteligencia artificial (IA) está irrumpiendo en varios sectores, y la industria del entretenimiento no es la excepción. Desde guiones generados por máquinas hasta efectos visuales y sonoros completamente automatizados, la IA está transformando la manera en que se conciben las producciones audiovisuales.
Uno de los ejemplos más recientes de esta tendencia es la recreación de la película clásica de Disney, La Bella y la Bestia, a través de la IA, una propuesta que ha sorprendido a los internautas por su capacidad de replicar esta historia sin intervención humana directa.
Estas recreaciones son producto del canal de YouTube Abandoned Films, conocido por sus recreaciones de franquicias populares mediante esta tecnología, que ha captado la atención de miles de personas en línea.
Su peculiar estilo está marcado por situar personajes y escenarios clásicos en épocas completamente distintas a las originales, y en el caso de la Bella y la Bestia, ambientando la historia en la década de los años 50.
Cómo recrearon con inteligencia artificial este clásico de Disney
En el tráiler creado, los personajes icónicos de La Bella y la Bestia, se muestran en un entorno que recuerda a la época dorada del cine de mediados del siglo XX.
Bella, interpretada por un personaje generado por IA, aparece con atuendos y peinados característicos de los años 50, mientras que Bestia adquiere una estética más propia de un filme de ciencia ficción retro, combinando elementos de fantasía con la tecnología futurista de esa década.
Otros personajes como Lumière y Din Don mantienen su esencia original, pero con un toque más mecánico y robótico, adaptándose a la visión “tecnológica” que el canal ha impreso en esta versión.
Qué herramientas de inteligencia artificial se usaron para la película
Para llevar a cabo este tráiler, se utilizó una combinación de herramientas de IA avanzadas que les permitió desarrollar cada aspecto del proyecto. El guion fue creado mediante ChatGPT, una plataforma de generación de texto con capacidad de producir contenido coherente y detallado a partir de simples indicaciones.
Esto facilitó el proceso de redacción de un libreto adaptado a la visión retro de los años 50, ahorrando el tiempo que normalmente requiere la creación de un guion tradicional. En cuanto a los elementos visuales, se utilizó la herramienta MidJourney, que generó las imágenes y el diseño de personajes y escenarios.
Esta plataforma fue fundamental para recrear la estética del cine de los años 50, con sus colores saturados y sus encuadres cinematográficos característicos del formato Panavisión 70, popular en esa década por su alta resolución y amplitud visual.
Por otro lado, para los aspectos sonoros y la ambientación musical, se empleó ElevenLabs, una herramienta de IA que generó los efectos de sonido y las voces de los personajes. También, RunwayAI, otra plataforma de IA, fue utilizada para pulir detalles de postproducción y efectos visuales.
Cómo se ven los personajes de una película hecha con IA
A pesar de los avances tecnológicos que permitieron la creación de este tráiler, el equipo de Abandoned Films se enfrentó a varios desafíos. Las producciones generadas por IA, aunque prometedoras, aún tienen limitaciones notables.
Uno de los problemas más recurrentes en estos proyectos es la falta de precisión en ciertos detalles visuales. En el caso de La Bella y la Bestia, se observaron algunos errores en la representación de los personajes: los ojos de Bella aparecían ligeramente desviados en ciertas escenas, y Bestia mostraba texturas que no se renderizaban de forma adecuada.
Incluso, en algunas tomas, los personajes parecían tener una cantidad incorrecta de dedos, un error típico en producciones basadas en inteligencia artificial.
Estas deficiencias técnicas, aunque menores para algunos espectadores, ponen en evidencia los retos que aún enfrenta la IA en el mundo del entretenimiento. La tecnología ha avanzado a pasos agigantados, pero aún no es perfecta, y sigue requiriendo ajustes continuos para lograr resultados más realistas y consistentes.
