Tres errores que debes evitar al comprar tu primer iPhone
La compra de un nuevo iPhone es una inversión significativa que muchos usuarios repiten cada dos o tres años, según datos de encuestas de Apple. Es probable que con el lanzamiento del próximo iPhone 16 en pocos días, miles de compradores quieran adquirir uno, así que es importante saber cómo tomar una decisión informadad
Con una vida útil promedio de 2,5 años, esta elección es crucial para maximizar el rendimiento y la longevidad del dispositivo, y no tener que recurrir a reparaciones frecuentemente.
Sin embargo, hay varios errores comunes que los compradores suelen cometer, lo que puede comprometer tanto la experiencia de usuario como el valor a largo plazo del teléfono. Aquí se aborda tres de los errores más frecuentes y cómo evitarlos.
Por qué no hay que guiarse por el precio al comprar un iPhone
El precio es, sin duda, un factor determinante para muchos compradores a la hora de elegir un nuevo iPhone. Los modelos Pro de Apple, como el iPhone 14 Pro o el iPhone 15 Pro, son conocidos por su alto costo, lo que lleva a muchos usuarios a descartar automáticamente esta opción.
Sin embargo, centrarse únicamente en el precio de entrada puede ser una visión miope cuando se trata de la relación costo-beneficio a largo plazo. Los modelos Pro ofrecen tecnologías avanzadas que no están disponibles en los modelos estándar.
Estos incluyen procesadores más potentes, pantallas de alta calidad con mayor tasa de refresco, cámaras superiores con capacidades profesionales y una mayor capacidad de almacenamiento base.
Todo esto contribuye a que los modelos Pro sean más duraderos y relevantes durante un período más largo de tiempo, evitando la obsolescencia prematura.
Qué precauciones seguir al comprar un iPhone usado
Otro error común entre los compradores que buscan ahorrar dinero es adquirir un iPhone de segunda mano sin verificar adecuadamente su estado y procedencia.
Aunque el mercado de dispositivos usados puede ser atractivo por los precios más bajos, también conlleva riesgos significativos. Comprar un iPhone a través de particulares sin las precauciones necesarias puede resultar en la adquisición de un dispositivo defectuoso o, en el peor de los casos, robado.
Para evitar estos riesgos, es esencial tomar varias medidas de precaución. En primer lugar, se debe solicitar la factura original de compra para verificar la propiedad legítima del dispositivo.
Además, es recomendable revisar si el iPhone aún está cubierto por la garantía de Apple y si el dispositivo ha sido reportado como robado o perdido. Esto último se puede verificar fácilmente ingresando el número de serie o el IMEI del dispositivo en la página oficial de Apple.
Al comprar de segunda mano, es aconsejable revisar físicamente el dispositivo antes de la compra para asegurarse de que no haya daños ocultos, como problemas con la pantalla, batería o cámara.
Cuánto almacenamiento necesita el iPhone
Uno de los errores más subestimados al comprar un iPhone es no considerar adecuadamente la cantidad de almacenamiento que se necesitará en el futuro. El iPhone está disponible en varias opciones de almacenamiento, que van desde 128 GB hasta 1 TB en algunos modelos.
Puede ser tentador optar por las opciones de menor capacidad debido a su precio más asequible, esto puede resultar en un problema a largo plazo si el almacenamiento se agota rápidamente.
Antes de realizar la compra, es crucial evaluar cuánto espacio de almacenamiento se necesitará en función del uso personal del dispositivo. Si el usuario no toma muchas fotografías, no guarda grandes cantidades de archivos o no juega en su dispositivo, un iPhone con 128 GB o 256 GB puede ser suficiente.
En cambio, si el usuario es un fotógrafo aficionado, graba muchos videos en alta resolución o almacena una gran cantidad de aplicaciones, la opción de 512 GB o incluso 1 TB será más adecuada.
Además, puede evitar gastos adicionales en suscripciones a servicios de almacenamiento en la nube, como iCloud, que aunque ofrecen espacio adicional, no solucionan el problema de la falta de almacenamiento local para aplicaciones y juegos.